DAHLIA PINNATA
La dalia pinnata, comúnmente conocida como dalia de jardín,
es una geófita tuberosa originaria de México. Pertenece a la familia Asteraceae
y es conocida por sus flores grandes y vibrantes que vienen en una variedad de
colores. Las dalias son plantas ornamentales populares y se utilizan a menudo
en jardines y arreglos florales. Tienen un período de latencia durante los
meses de invierno cuando los tubérculos se almacenan hasta la próxima temporada
de crecimiento.
Instrucciones de cuidado
Las dalias requieren luz solar directa y brillante para un
crecimiento óptimo y deben plantarse en un lugar que reciba al menos seis horas
de luz solar al día. Prosperan en temperaturas moderadas y prefieren un
ambiente húmedo. El riego regular es esencial, pero se debe dejar que la tierra
se seque parcialmente entre riegos para evitar la pudrición de la raíz. Las
dalias se cultivan mejor al aire libre en un entorno de jardín.
Cosecha
Los tubérculos de Dahlia pinnata generalmente se cosechan en
el otoño, después de que la primera helada haya ennegrecido el follaje. Para
cosechar, excave con cuidado alrededor de la planta para evitar dañar los
tubérculos, luego levante el grupo del suelo. Sacuda el exceso de tierra y deje
que los tubérculos se sequen durante unos días en un lugar fresco y seco. Una
vez secos, guarde los tubérculos en un lugar fresco, oscuro y libre de heladas
hasta que esté listo para replantarlos en la primavera. Asegúrese de que el
área de almacenamiento tenga una buena circulación de aire para evitar el moho
y la podredumbre.
Suelo
Las dalias prefieren un suelo arcilloso con buen drenaje que
sea rico en materia orgánica. El suelo debe mantenerse moderadamente húmedo,
pero no encharcado. Un buen drenaje es crucial para evitar la podredumbre de
los tubérculos. Agregar abono o estiércol bien descompuesto puede mejorar la
fertilidad y la estructura del suelo.
Fertilizante
Las dalias se benefician de un fertilizante equilibrado con
una composición de nutrientes de 5-10-10 (N-P-K). Fertilice las plantas cada
4-6 semanas durante la temporada de crecimiento para promover un crecimiento
saludable y una floración abundante. Evite fertilizar en exceso, ya que esto
puede provocar un crecimiento excesivo del follaje a expensas de las flores.
Trasplante
Las dalias generalmente se cultivan a partir de tubérculos
en lugar de trasplantarlas. Sin embargo, si necesita moverlas, hágalo a
principios de la primavera antes de que comience el nuevo crecimiento.
Desentierra con cuidado los tubérculos, divídelos si es necesario y vuelve a
plantarlos en una nueva ubicación con tierra fresca.
Propagación
Las dalias se pueden propagar dividiendo los tubérculos o a
partir de esquejes. El mejor momento para dividir los tubérculos es a
principios de la primavera antes de plantar. Cada división debe tener al menos
un ojo (brote de crecimiento). Los esquejes se pueden tomar de los brotes
nuevos en primavera y enraizar en una mezcla para macetas con buen drenaje.
Podar
La poda es esencial para las dalias para fomentar un
crecimiento más frondoso y más flores. Quite las puntas de crecimiento cuando
las plantas tengan aproximadamente 12 pulgadas de alto para promover la
ramificación. Quite las flores marchitas con regularidad para fomentar la
floración continua durante toda la temporada.
Toxicidad
Las dalias generalmente no son tóxicas para las mascotas y
los humanos. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar irritación de la
piel al manipular la planta. Siempre es recomendable usar guantes cuando se
trabaja con dalias para evitar posibles reacciones alérgicas.
Te
recomendamos de manera preventiva que pulverices la planta con jabón potásico +
aceite de Neem cada 60 días. También podés utilizar tierra de diatomeas diluida
para prevenir la proliferación de plagas.
Tips
Te
aconsejamos podar las hojas exteriores que naturalmente puedan deteriorarse
para darle lugar a los nuevos brotes.
Adicional
Para garantizar un crecimiento saludable, coloque tutores en
las variedades altas de dalia para brindarles soporte y evitar que se caigan.
Colocar mantillo alrededor de la base de las plantas puede ayudar a retener la
humedad del suelo y eliminar las malas hierbas. En climas más fríos,
desentierre los tubérculos después de la primera helada y guárdelos en un lugar
fresco y seco hasta la próxima temporada de plantación.
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