Fuchsia magellanica
Fuchsia magellanica, comúnmente conocida como pendientes de
la reina o fucsia resistente, es un arbusto caducifolio originario de las
regiones templadas de América del Sur, particularmente de Chile y Argentina. Es
conocida por sus hermosas flores colgantes que vienen en tonos de rojo, rosa y
morado. La planta permanece inactiva en invierno y vuelve a crecer en
primavera.
Instrucciones de cuidado
Fuchsia magellanica prospera en temperaturas moderadas y
prefiere luz brillante e indirecta. Requiere riego regular para mantener el
suelo uniformemente húmedo, pero no encharcado. La planta disfruta de una alta
humedad y debe protegerse del calor y el frío extremos.
Suelo
Esta planta prefiere un suelo arcilloso con buen drenaje que
retenga la humedad sin encharcarse. Una mezcla de tierra de jardín con materia
orgánica como abono funciona bien. Asegúrese de que el suelo tenga un buen
drenaje para evitar la pudrición de la raíz.
Fertilizante
Use un fertilizante equilibrado con una proporción N-P-K de
10-10-10. Fertilice cada 4-6 semanas durante la temporada de crecimiento para
promover un crecimiento saludable y una floración abundante.
Trasplante
Trasplantar Fuchsia magellanica cada 1-2 años o cuando
supere el tamaño de su maceta actual. Elija una maceta un poco más grande con
buen drenaje. Trasplantar a principios de la primavera antes de que comience el
nuevo crecimiento.
Propagación
Propagar Fuchsia magellanica a través de esquejes de madera
blanda tomados a fines de la primavera o principios del verano. Sumergir los
esquejes en hormona de enraizamiento y plantarlos en una mezcla para macetas
con buen drenaje. Mantener la tierra húmeda y proporcionar luz brillante e
indirecta.
Podar
Podar la planta a principios de la primavera para eliminar
las ramas muertas o dañadas y darle forma. La poda regular fomenta un
crecimiento más frondoso y más flores. Cortar justo por encima de un par de
hojas o brotes.
Toxicidad
Fuchsia magellanica no es tóxica para las mascotas ni para
los humanos. Todas las partes de la planta se consideran seguras, lo que la
convierte en una buena opción para jardines con niños y mascotas.
Te recomendamos de manera
preventiva que pulverices la planta con jabón potásico + aceite de Neem cada 60
días. También podés utilizar tierra de diatomeas diluida para prevenir la
proliferación de plagas.
Adicional
Para fomentar más floraciones, corte las
flores marchitas con regularidad. Colocar mantillo alrededor de la base de la
planta puede ayudar a retener la humedad del suelo y regular la temperatura.
Proteja la planta de los vientos fuertes, que pueden dañar sus delicadas ramas.
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